Caida libre

Caí,
Caí otra vez, pensé que seguiría de un modo diferente, pero no puedo dejar de sentirlo, de engañarme, de vivirlo.
Creí que esta vez sería indiferente
que la vida iba a seguir igual, yo caminaría junto a su ritmo loco, me sumergiría en pasares extraños, daría una y que otra vuelta por lugares plácidos, pero terminaría donde mismo, envuelta en un trayecto incierto.
Pero me permití creer, sentir que la vida perduraría un poco mas, que existía.
Empecé a graficar el sentido que tenían los segundos, que ocupaba mi cuerpo en este lugar.
Y no medí los parámetros, el consumo, los gastos, los beneficios, los límites, los altos y bajos, todo aquello que lo que traía y se llevaba.
Estiré mi mano esperando que alguien la cogiera, la estiré y agarré, agarre para sentirme firme, porque me sentía cayendo, estaba en blanco, no pisaba nada, no veía ni sentía nada.
Todo estaba vacío y frío.
Y al abrir mis dedos sentí un cálido soplido, un tenue confort y me subí, me subí creyendo estar en el vagón correcto, el tren aun no paraba y yo estaba aqui, todo se vislumbraba hermoso incluso podía sonreír.
Pero que logre mirar? Observe algo?
Me ilusioné en algo que yo misma creé.
Creí una vez mas, caí pero no fue en lugar ni en los brazos de la persona adecuada.


Me estremeciste, pero solo para hacerme despertar.